sábado, 31 de diciembre de 2011

FELIZ AÑO SINVERGÜENZAS

LECTURAS PARA EL CAGADERO: EL MAESTRO (FURILLO) O EL MAESTRO FURILLO



El Maestro, de Furillo(Ignacio Murillo) es escatología de España negra no apta para estómagos sensibles. En este álbum se recopilan las historias publicadas en el TMEO y además de regalo una historia larga e inédita en la que se explican los orígenes del Maestro. A veces me siento en la taza casi sin ganas y me pongo a leerlo  y releerlo y cuando me voy a dar cuenta me han salido unos zurullos de textura y color tan perfectos que apetece recogerlos y ponerlos un par de días en la mesita de noche al lado del despertador. Edita TMEO y pinchando AQUÍ o en la imagen de la portada os podéis informar de cómo conseguirlo.
Felices fiestas. Mas información en la  web no oficial del tmeo TMEOWORLD
Una frase de " El Maestro": "Poz yo le iba a deha er buhero er culo como la manga de un herzei vieho"

miércoles, 28 de diciembre de 2011

EDITORIAL DERROCH-ARTE PUBLICA MI NOVELA GRÁFICA "SURU:EL CAMINO DE LA INTROSPECCIÓN"


Open publication - Free publishing - More arbol
La editoria Derroch-arte ubicada en Jumilla, ha confiado en mi y publicará el próximo mes de Enero este ambicioso proyecto que consta de 1500 páginas a viñeta por página y se titula :Suru, el camino de la introspección. Trata de cómo un joven decide investigar en su propio yo con la sola compañía de un arbolito triste. En su largo camino hacia el interior de su corazón Suru se encontrará con que su cuerpo y su mente son parte de un todo y muchas cosas más. De momento , la editorial me ha dado permiso para adelantaros estas 9 primeras páginas.

martes, 27 de diciembre de 2011

EL OSO YOGUI, LA PUTA DE PATA DE PALO Y LA HIJA ANORÉXICA


Creo que ya os hablé de la amiga holandesa de mi Marisa. Es una amiga del pueblo de toda la vida pero que la llamo la holandesa porque vive en Holanda. Estas navidades volvió y se llevó a mi Marisa de juerga y como tienen muchas cosas que contarse (patatín patatán) yo no la acompañé a pesar de que Marisa sabe que me gusta presumir paseando con dos mujeres por los sitios donde me conoce todo el mundo. Vale.  Me quedé en casita y aproveché para revisar aquellos videos  VHS de mi adolescencia, aquellos en que salía la chica orinando en la boca del chico y que solo yo me atrevía a alquilar y después(años después) comprar en el videoclub. Recuerdo que un día la dependienta de las tetas grandes y pestañas rizadas se confundió de video y me puso en la caja (yo siempre comprobaba las cajas) uno de mete saca y gemidos mal doblados en vez del de orina y heces que yo había cogido y se lo hice saber.
- ¡¡PERDONE SEÑORITA PERO EL VIDEO QUE YO ALQUILÉ ERA DE ADOLESCENTES MEANDO Y CAGANDO Y  ESTE DE LA CAJA SE TITULA "TARZÁN MONTÓ LA GORDA"!!
- Da igual, son todas iguales-, dijo la muy ignorante, que se pensaba que lo sabía todo sobre cine.
- ¡¡POR FAVOR, SEÑORITA, HAGA USTED EL FAVOR!!- ,dije, mirando con cara de cinéfilo experto a la gente que miraba con cara de no sé qué, - "TARZÁN MONTÓ LA GORDA",NO HACE FALTA SER MUY LISTO PARA SABER QUE AQUÍ SOLO HAY POLLAS GRASIENTAS EN COÑOS HOLGADOS Y GEMIDOS  MAL DECLAMADOS!!
Al final me llevé la película por no montar un escándalo pero no volví nunca más a ese video club ni devolví la película jamás.
A lo mejor os estáis preguntando por qué me gustan las pelis de orina y heces y yo solo os diré que a veces es mejor no saber que saber demasiado, si es que esto que acabo de decir significa algo para vosotros; pero si insistís en saber, os recuerdo que el olor de los excrementos de las películas no sale de la pantalla y sin embargo resulta igualmente humillante-gratificante imaginarse a uno mismo revolcándose en ellos, dependiendo, claro está, del organismo del que procedan, la suavidad de la piel, los pezones de fresa y los rubores en mejillas y nalgas, si entienden ustedes a lo que me refiero.
Pero creo que les estaba hablando a ustedes de la noche en que Marisa y la Holandesa se fueron por ahí. Pues bien. El aparato de VHS se jodió cuando estaba viendo la peli de la puta de la pata de palo y su hijastra anoréxica y ninfómana que se encuentran con el tipo que va disfrazado del oso Yogui . Me jodió mucho porque era mi preferida y la busqué en Google: Yogui - puta- palo- anoréxica caliente, puse en el buscador, y apareció al instante ( ¡Probad!). Tuve una especie de experiencia espacio-temporal y por un rato volví a la tierna adolescencia y me masturbé cosa  de 6 veces hasta que me quedé dormido sobre el teclado del ordenador. Luego me desperté medio atolondrado y me fui a la cama. La holandesa y mi Marisa estaban durmiendo cuando me levanté porque se ve que habían llegado de madrugada y cuando se despertaron estaba yo tan contento haciendo mis ejercicios de Yoga.
-Estarías mejor con un traje de oso Yogui- dijo la holandesa.
-No tengo una pata de palo pero enseguida hacemos un apaño con la escoba- dijo mi Marisa.
Me puse colorado como un centollo mientras me volvía a mirar al ordenador y veía como en la pantalla una pata de palo se incrustaba en el coño de la anoréxica y esta se la chupaba al oso Yogui.
DESACTIVAR REPETICIÓN. Ya nunca  más se me olvidará.
En la imagen, página 1 de tres de una historia en la que sale una mujer sin piernas.

lunes, 26 de diciembre de 2011

LA NIÑA QUE LLORA Y LE BRILLA LA CABEZA


El otro día estábamos mi Marisa y yo viendo el programa ese de los fenómenos paranormales que no me acuerdo como se llama y salía una señora que decía que veía niños fantasmales en unos pasillos muy angostos de su inmueble. Mi Marisa se reía y decía que cuánto tarado hay por ahí suelto y yo le dije que un poco anormal sí que era la señora porque yo veía en mi casa del pueblo a una niña que lloraba a los pies de mi cama y ni siquiera se lo había mentado a nadie hasta el día de hoy porque parecía una niña inofensiva y su único problema era que tenía la cabeza luminiscente y yo duermo mal cuando hay luz. Mi Marisa se reía primero pero al ver que mi rostro se mantenía serio e impenetrable se puso seria y quiso saber más
- Pero Mariano, eso lo verías en sueños de niño y te parecía real pero no lo era.
-Esto no fue de niño sino ya de preadolescente, cuando ya tenía los huevos negros; y de dormir nada, cielito, que un día se plantó ahí mientras me hacía una paja y me quitó toda la lujuria del cuerpo, porque sé muy bien que hay pervertidos a los que les gusta enseñarles la polla a las niñas aunque estén muertas y les brille la cabeza pero a mí no me gusta que me miren cuando me la casco ni vivas ni muertas ni por web-cam porque una paja es algo íntimo y personal, Marisa; casi un acto de introspección y de conocimiento profundo del interior de uno mismo que no se debe practicar colectivamente y menos aún con una niña delante, llorando y mirando fijo con la cabeza iluminada como una puta bombilla, Marisa, no  sé si entiendes de lo que te estoy hablando o si alguna vez te ha ocurrido a ti algo parecido de niña o de adulta.
- Ay, Mariano, me estás asustando. Voy a hacer un acto de fe e imaginarme que me estás diciendo la verdad ¿Esa niña aparecía muy a menudo, hablaba, tenía aspecto siniestro o cómo era?
- ¡¡TENÍA UN ASPECTO DIVERTIDÍSIMO, MARISA!!¡¡¿NO TE ESTOY DICIENDO QUE LE BRILLABA LA CABEZA!!?
- Pero no sé, ¿No se te ocurrió preguntarle algo, saber que le pasaba?
- Claro, mujer, si te parece le voy a ofrecer galletas para que se me apalanque ahí todas las putas noches, si ya me jodía el sueño casi todos los meses un par de veces por lo menos.
- Vaya, ¿Y cuándo dejaste de verla?
- ¡¡NO DEJÉ DE VERLA , CARIÑO, SIGO VIÉNDOLA A LOS PIES DE NUESTRA CAMA.
Marisa dio por finalizado su acto de fe y me dijo que me fuera a la mierda. Yo no insistí porque nunca tuve especial interés en compartir mi aparición con nadie. No volvimos a hablar del asunto hasta esta noche que se me apareció el fantasma con su cabeza luminosa y llorando como siempre. Como ya le había contado la historia a Marisa, pensé que era un buen momento para hacer algo que ya hacía tiempo que quería hacer. Desperté a Marisa y le dije que ahí la tenía, para que viese que no soy un mentiroso, pero Marisa no veía nada.
- Bueno, cielito, si no puedes verla no puedes verla, pero ¿te importaría hacerme el favor de hacerme una mamadita antes de que se vaya a llorar a otra parte?
- Joder, Mariano, ¿no decías que no te gustaba hacer porquerías delante de una niña?
- No cariño, lo que no me gusta es cascármela delante de nadie pero que me miren cuando me la chupan me pone como una moto, además ahora ya no es una niña, ha crecido y se parece a una amiga de mi madre que estaba muy buena pero con la cabeza luminescente y los ojos más separados de la nariz.
Marisa me la chupó, pero noté los lengüetazos preocupados. El fantasma que se parecía a la amiga de mi madre lloraba pero ahora miraba para otro lado, la muy puta.
En la imagen, una historia parasubnormal de 12 páginas basada en un hecho real .

martes, 20 de diciembre de 2011

REGALA LOS SAPOS CIEGOS EN NAVIDÁ


La bonita portada a sangre y el prólogo de Xavier Águeda , que es el fabricante de las tiras de el Listo. Tiene 40 páginas en color y 28 en blanco y negro,(LA MITAD INÉDITAS EN INTERNETE), 15,2 x 22,5 cm y es mi tercer libro impreso. lo podéis encontrar en:
GIJÓN :
-Café Trisquel Chigre:C/ Marqués de San Esteban 30

-Librería Paradiso: C/ Merced 28. Gijón

Bar Cucurrabucu: C/ San Bernardo 8.Gijón.


OVIEDO:
Esperteyu chigre folk  :Calleja de la Ciega 2, Bajo33010 Oviedo, Spain


javiguerrero@javiguerrero.es, y os lo enviaré presto.
o en PAYPAL, PARA NO TENER QUE SALIR DE CASA,( y también os lo enviaré presto).TENÉIS AHÍ EN EL LATERAL EL BOTONCITO PARA COMPRAR.
El precio es de 4 euros y de 4 más gastos de envío si lo pilláis por correo o en pay pal.
LOS GASTOS DE ENVÍO SON :
ESPAÑA:2 euros
RESTO DE EUROPA¡INCLUIDA GROENLANDIA!!: 6 euros
RESTO DEL MUNDO: 10 euros
El caso es que en correos han redondeado hacia arriba (como todo) y ahora cuesta lo mismo enviar una carta de 100 a 500 grs, así que si pedís por correo a mi email 2 ejemplares o 3 de una tacada os ahorráis pelas de gastos de envío

UN CUENTO DE NAVIDAD

Un cuento de navidad para estas fechas tan entrañables. página 1 de 4

domingo, 18 de diciembre de 2011

SORAYA Y LA BLOGUERA DE ALCORCÓN

Si picáis AQUÍ podréis ver la carta vehemente y atropellada que le dedicó una bloguera a la Soraya por dar botes en una celebración a la semana de parir. Yo le aconsejaría a todo el mundo que no escribiera post en ese estado emocional en que se encuentra uno después de, por ejemplo, esto que encabeza la carta de la bloguera de alcorcón: "Querida: Me hirvió la sangre, me chirriaron los dientes y me clavé las uñas en las manos cuando te vi el domingo en la televisión". Es recomendable evitar las mesaduras de cabellos irracionales cuando se trata de criticar al enemigo y apuntar a cosas importantes y no a las arrugas de su vestido o a su manera de llevar la maternidad. Por otro lado, si picáis en la imagen, veréis que Mariano y Marisa sí que están siempre dispuestos a conciliar y participar activamente en las polémicas sociales que nos acompañan en estos tiempos de crisis.

sábado, 17 de diciembre de 2011

LAS RODILLAS DE SILVIA Y LA TIERNA ADOLESCENCIA.


Veréis, yo antes, hace casi 30 años, tenía pelo y estaba lleno de vida. También fui un niño aunque os cueste trabajo creerlo y mi madre me quería aunque le costase trabajo hacerlo. Mi padre hacía ver que miraba para otro sitio y mi hermana mayor era tan repulsiva de carácter y apariencia qué si me la encontraba en el pasillo por la mañana procuraba olvidar inmediatamente su existencia con tanta intensidad que cuando la volvía a ver a la hora de la comida tardaba un rato en reconocerla. A veces venían sus amiguitas a jugar con ella y yo me colaba en su habitación. Había una rubia preciosa. ¿Cómo se llamaba? Silvia. No debería olvidar tan fácilmente ese nombre porque no era muy común de aquella y el tamaño de sus pechos tampoco lo era para su edad. Silvia tenía 11 años pero aparentaba 14. Era corpulenta-que no gorda- como una nadadora rusa, o al menos eso me parecía a mí, enclenque, enano y cabezón. Cuando me abrazaba, mis orejas buscaban sus tetas. Olfateaba profundamente acercando mi nariz a sus axilas, queriendo retener el olor para más tarde. Las otras niñas querían ser mi madre también. Luzdivina, la gorda fea, olía siempre muy mal y yo, que era un niño bueno y sensible, huía diplomáticamente de ella; por ejemplo, si  me pasaba el brazo por encima del hombro, dejaba caer una canica al suelo y me escurría a buscarla,  así conseguía desembarazarme sin ofenderla, porque bastante tenía la pobre con ser un engendro hediondo. También estaba La Pili, que era muy guapa pero un poco machorro (en mi barrio, a las niñas que eran machorros o putillas se les ponía artículo delante). Siempre se reía de mí y me retaba a pulsos y carreras, pero yo era un poco nenaza en cuestión de deportes y lascivo en cuestión de niñas, y prefería sentarme en las rodillas de Silvia. Así fueron pasando los años y cuando ella tenía 18  y yo 12 se interrumpieron bruscamente mis sesiones en las rodillas de Silvia. Hacía meses que se la veía incómoda ante mi insistencia en sentarme en su regazo, 40 o 50 meses quizás, pero como era una niña tan buena y maternal no se atrevía a negarme el asiento por miedo a herir mi delicada sensibilidad. Aquel día estábamos solos mi hermana , ella y yo pero mientras mi hermana se duchaba y todo eso me quedé solo con Silvia y me senté en su regazo. Hacía tiempo que la polla se me ponía como una morcilla en cualquier situación: Comprándole el pan a la panadera de las mejillas sonrosadas, tropezando con la viuda del cuarto en la escalera, viendo un documental de caballos follando, viendo un documental de caracoles follando, viendo un documental de canguros follando, leyendo una revista en la que salía Carmen Sevilla con sus rodillas al aire, leyendo una revista de ropa interior femenina, con las tetas de las indígenas de los documentales sobre tribus africanas...El caso es que ese día con Silvia empecé a cruzar y frotar las piernas y convulsionarme para masajearme la polla de manera disimulada y de repente noté como los muslos de Silvia se ponían tensos. Se levantó bruscamente y sin decir nada se puso a hojear las estanterías de mi hermana. Estaba colorada como un centollo y yo también. Así se acabó todo. Ya nunca más me senté en las rodillas de Silvia y evité en adelante entrar en la habitación de mi hermana. ¿Verdad que es una historia triste? Pues ahora viene la parte graciosa. Hace unos meses mi Marisa y yo fuimos invitados a una comunión y nos tocó compartir mesa con una pareja de apariencia triste y ajada. Sí, lo habéis adivinado, eran Silvia y su marido, un tipo de cazo sobresaliente y ojos abesugados. No pareció reconocerme y pensé que sería mejor así, pero a las tres horas de beber vino sin parar el cerebro se me puso como una uva pasa y me identifiqué. Ella aseguró no conocernos ni a mí ni a mi hermana y eso me partió el corazón. Durante el resto de la velada la miraba insistentemente con ojos de carnero degollado.
Luego, ya en casa, le pedí a mi Marisa que me dejara hacerme una paja sentado sobre sus rodillas, después de contarle esta historia con los ojos anegados en lágrimas y ella accedió porque es una santa. Pero ya no era lo mismo y me puse más triste todavía. Ella se dio cuenta porque es muy sensible y dispuesta y después de hacerme una buena mamada abrió una botella de Rioja y brindó conmigo:
-Por la tierna adolescencia- dijo
-Tienes un poquitín de esperma en la barbilla-,respondí

miércoles, 7 de diciembre de 2011

EL ORDENADOR NO ME DEJA. ALTERCADO EN LA BIBLIOTECA JOVELLANOS

El otro día presencié una disputa en la Biblioteca Jovellanos en la que tomé parte a favor del usuario y luego envié un email de queja a la misma, él me respondió y yo le respondí. Este es el contenido de los emails:

Ayer día 1 de diciembre a las 19: 25 de la tarde un señor se confundió al
entregar un libro que todavía no tenía que entregar ni deseaba hacerlo, pero el
funcionario ya lo había pasado por el lector y estaba en reserva. El usuario
quiso retificar y el funcionario dijo que era imposible porque no le dejaba el
ordenador y amenazó con llamar a seguridad sino dejaba el libro en la mesa. El
usuario fue educado en todo momento, no así yo , que me enervé ante la
posibilidad de que dos adultos no pudieran solucionar un problema tan sencillo
por falta de voluntad de uno de ellos ¿REALMENTE EL PROGRAMA DEL ORDENADOR TIENE
MÁS AUTORIDAD QUE DOS ADULTOS ?En realidad me consta que no porque ya fui
testigo en una ocasión en que el bibliotecario sí rectificó un caso parecido en el ordenador a
alguien con en el que parecía tener confianza. El trato que recibió ese usario
me dio vergüenza ajena y me hizo recordar los tiempos de Franco. Estoy seguro de
que de haberme ocurrido a mí el bibliotecario sí hubiera tenido que llamar a
seguridad.
Atentamente:
Javiguerrero
Buenos días
En relación con el caso que denuncia no puedo sino estar en disconformidad con lo que usted manifiesta, con todos mis respetos.
Evidentemente, como no estuve presente en el momento de la disputa entre el usuario y el funcionario que le atendía, mi información no es directa, sino de segunda mano, pero por los datos que tengo creo tener una idea bastante clara de lo que pasó. Usted luego me dirá.

Mi idea de lo acontecido es la siguiente: un usuario se acerca hasta la Biblioteca para devolver varios documentos que tenía en préstamo. Los entrega al funcionario que estaba al cargo de las devoluciones y éste procede a devolverlos. En el momento en que devuelve uno de los documentos (en concreto, un dvd de la serie "****") el ordenador avisa de que se ha activado una reserva a nombre de otro usuario. En el instante en el que el funcionario va a tomar nota de la reserva para dar aviso de la misma, el usuario que ha entregado el dvd dice que no, que no lo quiere devolver, que se ha equivocado y que quiere llevárselo otra vez, y de hecho se lo quita al funcionario de las manos.
Lógicamente aquí salta el problema porque el dvd ya estaba devuelto y se había activado la reserva para otro usuario, por lo tanto, aunque el funcionario que estaba en el mostrador quisiera volver a prestárselo no puede, el ordenador no le deja hacer el préstamo. Se entiende entonces que el funcionario se resistiera a dejarle de nuevo el dvd porque entonces a quien estamos perjudicando en sus derechos es a todos los usuarios que tenían reserva sobre ese vídeo.
Al llevarse el usuario el dvd, sin prestar en el ordenador, hemos tenido que rastrear todas las reservas que tenía el documento y borrarlas porque una vez activada la primera, si no se eliminan, cada tres días se irían activando automáticamente las siguientes, se perderían y los usuarios se quedarían sin dvd y sin reservas. Cuando el usuario que generó el problema tenga a bien devolver el dvd habrá que recuperar las reservas, volver a introducirlas en el ordenador por su riguroso orden y activar la primera para que todo vuelva a su cauce natural.
Yo creo que la cosa fue así. En mi opinión una vez que el lector devuelve el documento y se activa una reserva ya no hay marcha atrás. Además ¿si no pensaba en devolverlo por qué cargó hasta la Biblioteca con él?. En cualquier caso vuelvo a repetir que quien ha salido perjudicada de todo esto es la usuaria que estaba esperando por el dvd y que ahora tendrá que esperar unos cuntos días más por él.
Aunque parezca lo contrario los funcionarios que están en el mostrador de préstamo no hacen las cosas por capricho y, en la medida de lo posible, se atiende las sugerencias de la gente y sus deseos. Evidentemente todos tenemos un mal día y se nos pueden cruzar los cables pero, al menos en este caso, quien tenía los cables cruzados era el usuario, no el funcionario.

Atentamente  ****

Entiendo perfectamente el problema. El problema es que se le ha dado más
autoridad a una máquina que al adulto que se encarga de gestionar la biblioteca
y que debería tener autoridad para deshacer equívocos propios de usuarios y
funcionarios responsables de la misma. Dos adultos maduros y responsables
hubieran resuelto la incidencia sin ningún problema si el programa informático
estuviera hecho para tratar con personas y no con dígitos. De ninguna manera
debería permitirse que un programa informático destinado al uso público y por lo
tanto al servicio del usuario y del funcionariado también, provocará un altercado
entre personas civilizadas. Mi sugerencia es que se pongan en contacto con la
empresa que facilita el programa y les adviertan de que el programa no es
funcional y da problemas sonrojantes. No se trata de quién se equivocó o tuvo la
culpa o de si se trataba de un usuario inestable (algo que se me pasó por la cabeza
ante su insistencia desesperada por volver a llevarse a su casa el dvd), se
trata de que un ordenador no debe tener voz ni voto en ningún caso porque, a
dios gracias, todavía no se han hecho ordenadores con nuestra capacidad de
interactuar e improvisar ante incidencias comunes. Podría darle una
explicación más amplia sobre el funcionamiento del cerebro y su clara
superioridad sobre cualquier sistema informático, no ya en la gestión de datos
sino en la capacidad de adaptación al medio  externo mediante una sutil
interacción entre los diferentes niveles, neocortex y zona límbica, por
abreviar, y la intervención de los marcadores somáticos que hacen que las
emociones intervengan en las decisiones racionales. ¿Por qué cree usted sino que
finalmente el funcionario dejó que el cliente se fuera con el dvd? Los
marcadores somáticos añadén al razonamiento puro la lógica emocional que no es
más que una impronta que se almacena y se gestiona en nuestra zona límbica y también en la
corteza prefrontal*. Esa  lógica que permitió que  finalmente no se hiciera algo
tan ridículo y de tan poco sentido común como llamar a seguridad. Siento mucho
también que hayan tenido ustedes que dedicarle un poco de tiempo a ese usuario
por culpa de la ineptitud de los programas que rigen su vida laboral, pero creo
que la solución solo la tenemos nosotros. Apuesto a que a todas las personas
presentes les pareció ridícula la disputa y seguro que si hubiera estado
presente el sujeto que reservó el documento hubiera abreviado asegurando que
podía esperar unos días más.
Atentamente:
Javiguerrero 


 

EL ANCIANO LIBRERO DE LA BARBA LARGA Y LA LUPA


Cuando era joven, impulsivo y lleno de energía intenté que me declararan incapaz de la mente y me dieran una paga de por vida. Primero le dije al médico de cabecera que tenía delirios religiosos y fantasías sexuales con hamsters muertos y trozos de hígado y este me remitió al servicio de salud mental. Allí me atendió una psicóloga muy simpática con la boca toda llena de dientes y los ojos orlados de pestañas. Los síntomas que le describí no debieron cuadrar con ninguna patología de su lista de patologías, probablemente porque no preparé el relato de las circunstancias que rodeaban mi vida y algunas de sus preguntas insidiosas debieron descubrir alguna  incompatibilidad con las posibles enfermedades en que podría incluirme a juzgar por los síntomas. Así que cambié de médico de cabecera y de distrito postal y repetí la operación pero esta vez me limité a simular una depresión con instintos suicidas. Me remitió también a salud mental y esta vez me atendió una mujerota gorda con la cara colorada. Le dije que solo me quería morir y que todo se acabara patatín patatán, estuve todo el rato con la mirada huidiza y emitiendo miradas nerviosas a la puerta, queriendo aparentar que temía algún peligro o deseaba salir corriendo, levantándome bruscamente en posición de huida y volviendo a sentarme después sin demasiada convicción. Más tarde me enteré de que mi actitud era un poco incongruente y que la ansiedad que había mostrado tampoco era compatible con la depresión paralizante de instintos suicidas. La señora me recetó unos ansiolíticos y no concertó nueva cita. Volví a probar suerte con un nuevo médico de cabecera y cambiando de distrito postal para no coincidir con los anteriores psicólogos. Esta vez le dije que había una voz que me decía todo el rato que orinara y defecara en público y que no hacía más que comer gelatina todo el rato. El médico de cabecera  era un tipo muy gracioso con los ojos pequeñitos detrás de unas gafas muy grandes que hacían juego con el tamaño de sus orejas
- Uhm-,dijo- así que la voz le dice que orine y defeque públicamente y coma gelatina todo el rato.
Me dio un ataque de risa porque me hizo gracia la repetición de mis síntomas en boca de un tipo con aquellas orejas y esos ojitos diminutos. Además se había confundido.
- No me ha entendido, lo de la gelatina es cosa mía, la voz solo me dice que orine y defeque.
Ahora le dio a él un ataque de risa.
- Vaya, me ha caído usted en gracia. Le voy a preparar una orden de jubilación, pero le ruego encarecidamente que deje de comer gelatina todo el rato, ya que ninguna voz le impele a ello.
Escribió unas líneas en un papel y lo firmó y me lo dio. Me puse muy contento y le di las gracias y me fui. "Este señor no está pa trabajar", decía el papel. Antes de salir del centro de salud caí en la cuenta de que me había olvidado la chaqueta y volví a la consulta a recogerla pero allí donde antes había un médico de gafas con la cara muy graciosa, ahora había un viejo librero con una barba blanca y una lupa, pero nadie se lo cree y ahora han pasado los años y ni yo mismo estoy seguro de que todo aquello hubiera ocurrido, solo mi Marisa me dice a veces, cuando no puede dormir:
- Ay, cariño, cuéntame otra vez lo del librero de la barba blanca.
Y entonces yo cojo y se lo cuento mientras ella reposa su cabecita sobre mi pecho, pero los dos nos quedamos dormidos antes de que consiga recordar lo que ocurrió después con el anciano librero de la lupa. 
En la imagen, página 1 de 5

domingo, 4 de diciembre de 2011

MARISA LO CUENTA


Le dije a mi Mariano que se descapullara bien para lavarse el glande y él me dijo que para qué si no se lo iba a ver ningún desconocido. Le dije que se lavara los dientes más a menudo y que no se rociara el desodorante sobre los sobacos añejos; que no me mostrara el bolo alimenticio durante la comida en el restaurante mientras me explicaba lo de aquel día que vomitó unos mejillones como los que estábamos comiendo y salieron casi sin digerir y con aspecto de mejillones. Que no se cortara las uñas de los pies en la cocina; que no se masturbara en la terraza, que aunque él no las vea, las personas a veces se agazapan tras las cortinas y miran. Por fin, me vi obligada a darle un ultimatum y le di por escrito la lista de todas estas cosas que me desagradaban de él y le hice saber que si no cambiaba de actitud le echaría de mi casa. Se me quedó mirando con los ojos muy abiertos y me dijo:
- Creo que lo de lavarme el  glande no es una idea descabellada, Marisa, siempre y cuando accedas a tragarte la leche cuando me la chupes. Sobre el resto de demandas, las estudiaré y dentro de una semana nos podemos reunir para negociar.
Es que es un solete ¿Quién va a echar a la calle a un hombre así? 
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